Los cacahuetes son ricos en sales minerales, vitaminas, proteínas y fibras: contienen, por ejemplo, grandes cantidades de magnesio, hierro, zinc, fósforo, potasio, cobre, calcio, manganeso y sodio, así como vitamina E, J (colina, B7) y vitaminas del grupo B en general.
Esto hace que los cacahuetes sean adecuados para las personas con deficiencias que sufren de fatiga crónica o incluso para deportistas.
Al ser un alimento rico en potasio, ayuda a una buena circulación, regulando la presión arterial por lo que es un alimento beneficioso para personas que sufren hipertensión.
Según varios estudios llevados a cabo sobre los cacahuetes, gracias a su excelente contenido de grasas monoinsaturadas, son útiles en la prevención de enfermedades cardiovasculares y la aparición de tumores. El consumo de estas semillas tiene, de hecho, efectos positivos sobre salud del corazón y las arterias, reduciendo los niveles de colesterol en sangre.
Los cacahuetes son una fuente rica de antioxidantes, con importantes beneficios para la salud, la piel y el cabello. Al ser crudos mantienen intactas todas sus propiedades.